Cuando observamos la vida de las personas, vemos que lo que las personas quieren en el día a día es salud, armonía, paz, éxito, prosperidad, etc. Sin embargo, contrariamente a lo que quieren, las personas se enfrentan cada día a más enfermedades, desarmonía, limitación, angustias, preocupaciones, etc. La contradicción está en que las personas quieren lo mejor en sus vidas pero no buscan como obtener eso que quieren; y cuando quieren cambiar, los hábitos y las costumbres que tienen las personas no le ayudan a obtener los cambios que buscan.
Es evidente que la época que
vivimos es la época de la información, la ciencia y la tecnología, pero pese a
que hoy tenemos toda la información disponible por todos los medios como revistas,
periódicos, radio, televisión, internet y otros, las personas no han aprendido
a conducir sus vidas y lograr lo que quieren, al contrario hay mucha confusión
por el exceso de información en que vivimos.
Con toda la información que
hoy tenemos, el hombre no ha logrado conocerse y menos comprenderse a sí mismo,
conocer cómo funciona su mente, sus pensamientos, sentimientos, emociones y
palabras que es lo que crea su vida a cada momento.
El hombre en sí mismo es la
obra suprema de la Creación, todos somos seres únicos, valiosos, dignos y
merecemos lo mejor de la vida. Pero en nuestra realidad somos lo que somos y
estamos en el lugar que estamos por los programas que hemos puesto en nuestra
mente; cambia los programas que has puesto en tu mente y cambiarás tu vida,
prográmate para el éxito y lograrás el éxito en todos los aspectos de tu vida.
El hombre, siendo la creación
suprema, no ha logrado conocerse a sí mismo, y hoy tiene mucho que aprender de las
máquinas y la tecnología. Pero hay que saber que los científicos para crear las
máquinas han imitado básicamente el funcionamiento integral del cuerpo humano. La
cibernética, la robótica, la mecatrónica, la informática, incluyendo la neuro-programación
pueden enseñarnos mucho para superarnos y lograr lo que queremos en la vida.
La mente funciona como una
computadora; cada pensamiento, cada idea fija, cada creencia es un programa que
la mente ejecuta de manera precisa y exacta para crear nuestra realidad. Desde
el vientre materno hasta la actualidad hemos creado consciente o
inconscientemente los programas que hoy conforman nuestra vida y nuestro ser.
Hay dos hechos en la vida que
nos conducen al cambio y a la superación: darnos cuenta que la superación es
vital en la escuela de la vida, o experimentar desarmonía, caos, enfermedad,
sufrimiento o dolor. La persona que no quiere cambiar nunca cambiará, pero la
persona que quiere cambiar, aunque esté pasando un gran sufrimiento, cambiará.
La vida es un continuo
aprendizaje y todo lo que somos, sabemos y hacemos, bueno o malo, positivo o
negativo, todo lo hemos aprendido. La pobreza y la riqueza, el éxito y el
fracaso, la salud y la enfermedad, la violencia, la agresividad, la mediocridad,
la superación, la excelencia, etc., todos son programas psicológicos
aprendidos. Aprendizaje es igual a programación.
El primer paso para cambiar
los programas negativos que están determinando nuestra vida en este momento es
darnos cuenta que estamos programados. El segundo paso es decidirnos a cambiar,
el cambio es una decisión individual porque nadie cambia a nadie, el cambio se
da cuando la persona quiere cambiar. Querer es poder.
Para cambiar los programas
limitantes y condicionantes, y reprogramarnos para la superación y el éxito en
todos los aspectos de la vida es necesario conocernos a nosotros mismos,
comprender nuestras creencias y valores, comprender nuestra mente y nuestros
sentidos, y sobre todo comprender nuestro Ser y su relación con la Creación y
el Creador. (Esta nota seguirá ampliándose y modificándose) ¡Mis mejores deseos
de Salud, Armonía, Éxito y Prosperidad para todos!
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